sábado, 17 de marzo de 2012

El Chispas


Hace poco releí este post sobre el síndrome del viajero eterno. Define perfectamente algunos sentimientos que yo he tenido y tengo por mi culo inquieto. Esta vida que algunos elegimos llevar tiene muchas cosas buenas, supongo que por eso lo seguimos haciendo. Lo malo son días como hoy, en que no existe el teletransporte y solo quieres estar en un sitio. Así que, mentalmente estoy subiendo las escaleras del Tío Pintao mientras me miras y me esperas desde arriba con una moneda de 500 pesetas escondida en el bolsillo.
Uno puede ver chispas del alma brillando a través de un cerebro que no funciona bien y estabas ahí cada vez que buscaba en tus ojos. Por algo te conocían como el Chispas, para que no dejaras de brillar hasta el último momento.